La confianza es el fundamento de toda relación social que no esté sustentada en la fuerza. Toda relación sana, que permita que todos sus integrantes crezcan, se tiene que construir sobre la base sólida de la confianza.
Cuando hay confianza no hay temor y cuando no hay miedo todo problema es posible solucionarlo. Toda confianza en el equipo, empieza adentro de cada individuo que integra ese grupo. Lo que pasa afuera, tiene que ver con el adentro.
“Para hacer una relación sustentable, debes cobijarla con respeto, compromiso y confianza. Con estos abrigos, es capaz de enfrentar y resistir ante las peores tormentas”. Patricia Uhrich
El valor de la confianza es muy necesario en las organizaciones. Si no hay confianza dentro del equipo de trabajo, cualquier problema puede resultar difícil o hasta imposible de solucionar.
Si no hay confianza el cliente deja de venir y no hay empresa que se pueda sostener. El valor de la confianza se sostiene con el valor de la palabra, con las promesas que se cumplen, con recompromisos que se construyen.
Es un acuerdo de respeto mutuo que hace que todo lo que se desee construir sea viable. Es la base firme sobre la que hay que construir toda relación, sea de pareja, de familia o en la empresa.
La ausencia de confianza incrementa tu vulnerabilidad.
La falta de confianza es una señal de alerta, es un aviso de un eventual peligro. Tienes la sensación que tu integridad podría estar en juego.
En cambio cuando sientes confianza, te sientes seguro. Si una persona te inspira confianza, tienes la impresión de que ella “sabrá hacerse cargo de ti”, que se preocupará de las cosas que te importan, que tomará en cuenta tus inquietudes.
Cuando la desconfianza aparece, comienzas a hacer acciones para tu conservación. Acciones que apuntan a protegerte, incrementar tu seguridad y reducir la vulnerabilidad.
Es posible que hagas muchas cosas tú mismo para evitar delegar. Todas acciones, hijas de la desconfianza.
Cuando logras trabajar la confianza, primer en ti mismo, comienzas a generar acciones transformadoras, quieres conquistar nuevos mundos y posibilidades. Serán acciones de innovación, de invención.
Cuando tienes confianza en ti mismo, te atraves a lanzarte a lo desconocido. La confianza, por lo tanto, es el elemento básico que alimenta el espíritu emprendedor.
Como todo lo que ocurre afuera, también ocurre adentro, solo nos queda cambiar en el mundo interior. Allí es donde necesitas trabajar la confianza en ti mismo y eso es un proceso de día a día.
Para crear la confianza en ti mismo, es importante que empieces cambiando tu lenguaje interior. Comienza declarando adentro tuyo que tienes capacidades, que estás aprendiendo, que tienes los recursos necesarios para transformar todos los desafíos.
Trabajar la confianza en ti mismo es creer que puedes, es creer que has sido creado con los recursos y las capacidades para salir adelante, es creer que te mereces lo mejor.
Cuando hagas cada día este trabajo contigo mismo, en tu interior, refuerzas tu autoestima, tu identidad y te sientes en paz que estás haciendo lo correcto: amarte a ti mismo.
Cuando aparece la desconfianza en lo que eres capaz de hacer, aparece el temor y cuando hay temor o miedo se va el amor. Todo espacio de confianza se construye desde el amor.
Si no eres capaz de amarte y aceptarte como eres, para luego cambiar lo que no te satisface, jamás podrás tener confianza en ti mismo.
Comenzar a confiar en ti hará que luego comiences a encontrar en tu mundo exterior a gente en quien confiar, con quienes puedas formar un grupo o equipo de trabajo para entre todos construir un mundo donde sea digno pertenecer.
Si en tu vida hoy te han faltado a la palabra y esto ha roto el código de confianza, te propongo que lleves esa experiencia a tu interior y te preguntes allí en tu interior qué voto de confianza no te estás dando.
Porque uno a veces comete el error de darle voto de confianza a alguien afuera y se quita voto de confianza a si mismo.
No podemos dar de lo que no tenemos, así que el primer paso comienza conociéndote a ti mismo y dándote votos de confianza. Todo en la vida es un aprendizaje constante y un volver a empezar.
Si ayer no te valoraste o confiaste en ti, hoy puedes empezar. “Haz en ti los cambios que quieres ver en el mundo” decía Gandhi y es así. Solo cambiando adentro, terminamos cambiando afuera.
Déjame tu comentario aquí abajo sobre tus experiencias frente a la confianza.
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Un abrazo
Patricia Uhrich – A tu disposición, para ayudarte en tu crecimiento y superación personal
Hola Patricia!! Que razón tienes. Cuando la confianza se pierde, que difícil es recuperarla!!. Pues cuando estas creando lazos con otra persona, solo se sostienen a través de alimentar y construir juntos. Si alguien falla,….esos lazos se rompen…..quizá para siempre.
“Confianza es el sentimiento de poder creer a una persona incluso cuando se sabe que él mentiría en nuestro lugar.” Henry Louis Mencken
Un gran artículo como siempre. Enhorabuena!!
Elvira, me alegra que te haya gustado este artículo. Me pareció interesante refrescar este tema por internet, sabiendo que las relaciones se pueden sostener en el tiempo si cultivamos la mutua confianza. Y la confianza se crea con acuerdos que se cumplen, con palabras que se dan y se respetan, con estar ahí, con respeto, con consideración hacia el otro, sabiendo que si rompemos la confianza, nos estamos en primer lugar lastimando a nosotros mismos y luego a los demás. Porque quien miente y tras eso rompe la confianza, en primer lugar se miente a si mismo. Y quien se miente no se está respetando en el verdadero ser que es. Abrazos
hola Patricia muy buenas tardes, estoy haciendo estudios de maestría en la universidad de la Sabana y mi trabajo de grado se centra el fomentar una cultura de confianza en mi sitio de trabajo que es un colegio de una zona marginal de la ciudad, me gustaría escuchar algunas recomendaciones para realizar mi ejercicio de intervención.
un abrazo infinitamente agradecida
Isabel
Isabel escríbeme un mail privado a patriciatucoach@gmail.com así me explicas un poco más de tu intervención para darme algunos tips de recomendación. Saludos cordiales. Patricia